¿Cuáles son sus sueños?
En el Perú, 13 de cada 100 niñas y adolescentes se embarazan o son madres. En números absolutos se traduce a un millón y medio de mujeres entre 10 y 19 años, que constituyen el 10% de mujeres peruanas. Si ésta cifra le parece muy alta, imagínense lo que ocurre en las regiones de la selva y zonas rurales cuyos porcentajes superan el 100% de este volumen.
Más que repetir la data e insistir en como miles de adolescentes labran una ruta segura al fracaso, lo que deberíamos hacer es conocer lo que nos cuesta tanta negligencia. ¿Dónde estaríamos si al menos el 40% de mujeres que dejaron la escuela por esa causa, no se hubiesen encontrado en esta situación?
Hoy, muchas de ellas estarían pugnando por sus sueños, entre los que están el tener una formación técnica o superior, pues, aunque eso implique más gasto en educación, hubiera sido más rentable que mantener de manera sostenida al 33% del trabajo informal, que es lo que precisamente aportan las mujeres entre 15 y 24 años (OIT, 2015).
Para quienes piensen que son políticas o suscripción de documentos lo que nos faltan, sino su incumplimiento sistemático. Contamos con el Plan Multisectorial de la Reducción del Embarazo en Adolescentes (2011), el Plan Nacional de Acción por la Infancia y los sendos compromisos internacionales, que como país hemos firmado.
La pobreza y embarazo en adolescentes están muy imbricados, el análisis presentado en la Alerta N°1 de la Mesa de Concertación de Lucha Contra la Pobreza (2018), en el que se muestra el incremento del embarazo en adolescentes en un 55% entre el 2016 y 2017, en Lima Metropolitana impulsa a preguntarse ¿qué está impidiendo que políticas que parecen razonables y trabajadas en base a evidencias, no tengan resultados positivos?
El conservadurismo al gestionar una educación sexual integral no se alinea a la realidad de los y las adolescentes ni reconoce que la mayoría inicia su vida sexual alrededor de los 14 años. Además, hay proveedores que aún creen que dar consejería, orientar y brindar anticonceptivos a mayores de 14 años, es ilegal cuando es vital para su autocuidado.
Artículo tomado del Diario La República