¿Qué hay detrás de una niña invisible? Trata de personas y salud
El reportaje que habla de las niñas invisibles en Madre de Dios nos conmovió. Nos dimos cuenta de que en nuestro país, niñas y adolescentes estaban siendo víctimas de trata de personas para la explotación sexual. En el Perú el 60% de victimas de trata de personas reportadas por el Ministerio Publico son menores de edad, de las cuales el 90% son mujeres1 y provenientes de Cusco, Puno, Iquitos, Piura, entre otras regiones. ¿Cuál es la realidad detrás de estas niñas que son invisibles para el Estado?
Cuando las niñas y adolescentes son víctimas de trata de personas, la salud mental y emocional es gravemente afectada. El stress severo y prolongado puede causarles afecciones cognoscitivas, emocionales y posiblemente regresión en el desarrollo. El impacto de la trata en las víctimas es devastador, y en el caso de las niñas, estas soportan una serie de vulneraciones de sus derechos que se traducen en malestar y sufrimiento en un momento crítico para su desarrollo psicosocial y físico.
Muchas niñas y adolescentes son captadas fácilmente porque viven en un estado de abandono emocional y físico por parte de su familia, y cabe la posibilidad de que muchas de ellas hayan estado en situaciones de abuso y que no sea su primer encuentro con situaciones de violencia2. En especial en niñas y adolescentes con experiencias de violencia o abuso, la experiencia de trata de personas puede agravar la afectación en su salud integral.
Las afectaciones físicas, mentales y emocionales son muchas: dificultades en su desarrollo, tartamudeo, ansiedad, pesadillas, irritabilidad, pérdida de apetito, incontinencia urinaria, confusión, tristeza, agresividad, pérdida de autoestima, depresión, pobre o débil concentración, alto riesgo de uso y abuso de sustancias psicoactivas (drogas), ideas de suicidio, entre otras. A ello se suma la altísima probabilidad adquirir Infecciones de transmisión sexual, incluido el VIH/SIDA, tener un embarazo no deseado y abortos inseguros.
Las necesidades de recuperación emocional, salud mental y salud física de las víctimas de trata de personas son grandes y diversas, requieren de cuidados especiales de acuerdo a su edad, un cuidado consistente para que les permita recobrar su salud integral y restablecer sus derechos; y esto dependerá básicamente de si se cuenta con personal de salud capacitado en el tema, autoridades sensibilizadas y en general, a los diferentes sectores del Estado comprometidos con enfoque de respeto a los Derechos Humanos y de no re-victimización.
Lamentablemente la cifra disponible sobre casos de trata de personas se refiere al pequeño número de víctimas que han tomado contacto con alguna dependencia del Estado. La mayor parte de niñas y adolescentes víctimas aún permanece invisible y toca al Estado no seguir ignorándolas.
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[1] Diario la Republica, 22 de febrero – 2016
[2] 2012 OIM – Cuidados para la salud y la trata de personas – London School for Higiene and Tropical Medicine (LSHTM) pag 71, 137.
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